TRADUCCIÓN

Mostrando entradas con la etiqueta Úbeda. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Úbeda. Mostrar todas las entradas

martes, 18 de noviembre de 2014

LOS CERROS DE ÚBEDA

¿Por qué de todos los parajes en los que uno puede perderse son los cerros de Úbeda los escogidos para divagar o extraviarse? Quizá porque, como decía Antonio Machado, «cerca de Úbeda la grande, cuyos cerros nadie verá, me va siguiendo la luna, sobre el olivar».
No hay quien visite esta ciudad de Jaén declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco en 2003 sin preguntar por sus famosos «cerros», cuando éstos no son más que una «engañosa ironía andaluza que hace "picar" al más docto», según aseguraba Manuel Barrios. El autor de «Modismos y coplas de ida y vuelta» (1982) aclaraba que «Úbeda no tiene cerros».
Fuentes de Turismo del Ayuntamiento de la ciudad replican que «Úbeda está en un cerro y hay cerros en sus alrededores. Lo de los cerros es verdad», aunque desde el Archivo Histórico Municipal precisan que «es imposible perderse en ellos porque es una zona muy alomada y Úbeda se ve desde 60 kilómetros de distancia».
Imposible o no, a estos cerros cuentan que se refirió Alvar Fáñez, «el Mozo» cuando hubo que responder ante Alfonso VIII. El rey castellano se disponía a apoderarse de Úbeda, animado por la victoria lograda en las Navas de Tolosa. Había cercado la ciudad y encomendado a este caballero la vigilancia del flanco sur. Alvar Fáñez, que quizá fuera descendiente del famoso compañero de El Cid, se distrajo de sus funciones con una bella mora faltando a su deber. Cuando el Rey le reprochó su ausencia y le preguntó dónde había estado, la respuesta del caballero fue: «Por esos cerros, señor». «Sin dar en la cuenta de que ellos no existían», añadía el historiador Rafael Gallego Díaz en 1959.
Hay otra versión de este relato que obvia a la joven mora y afirma que Alvar Fáñez no quiso tomar parte de la conquista de Úbeda. Según quién cuente la leyenda la sitúa en el reinado de Alfonso VIII, cuando se tomó a sangre y fuego la ciudad tras la batalla de las Navas -aunque «al mes tuvieron que dejar Úbeda por una epidemia», explican fuentes del Archivo Histórico Municipal-; o bien en la conquista definitiva por Fernando III «El Santo» en 1233, siete años después de que cayera su vecina Baeza.
«Ninguna de las versiones tiene base ni fundamento histórico. Pertenecen a la leyenda», apuntan en el Archivo de la ciudad.

¿El Cid?

Juan Pasquau Guerrero aludía, en un artículo publicado en ABC en 1959, a otra versión sobre el origen de la frase que ofreció entonces el investigador Lorenzo Polaino Ortega. Según esta otra leyenda, Alfonso VI había acampado en Úbeda allí por el año 1091 tras haber fracasado en su intento de conquistar Granada. El Cid, que en su afán de reconciliarse con el monarca había dejado el cerco de Liria para aprestarse en su ayuda, seguía a distancia a las tropas reales. Cuando Alfonso VI acampa en el castillo de Úbeda, espera que el Campeador se hubiese situado en otro emplazamiento y no en el llano, junto al río. Extrañado ante la actitud del Cid, el monarca le preguntó: «Pero, ¿por dónde salís ahora, don Rodrigo?». Y éste respondió: «Señor, por los cerros de Úbeda».
«Por eso, desde entonces, cualquiera que da un sesgo inesperado y más o menos ingenuo a sus hechos o razos, «sale por los cerros de Úbeda», señalaba Pasquau.
En la revista Alrededor del Mundo de 15 de marzo de 1934 se dice sin embargo que la frase «se aplicó por primera vez a un alcalde dicha ciudad, el cual, dándoselas de galanteador, acudía diariamente a una fuente situada al pie de unos cerros próximos, a la busca de cierta guapa moza que, por cierto, no correspondía a sus solicitudes.


«Y como pronunciando un discurso en cierta ocasión la tal autoridad municipal se apartara, en el calor de la improvisación del asunto objeto de su oratoria, una moza del pueblo atajóle la palabra diciéndole: "Señor alcalde, tenga usía cuidado, que se va por los cerros de Úbeda», señalaba en el apartado «El mundo marcha».
Puede que todas las versiones no sean más que leyendas o ucronías y que los tan traídos y llevados cerros apenas sean lomas, o nubes según la versión argentina del dicho... o que la historia real se haya perdido para siempre por los cerros de Úbeda.
Juan de la Cruz Moreno Balboa

sábado, 1 de noviembre de 2014

domingo, 19 de octubre de 2014

SOBRE LA CÁRCEL DE ÚBEDA

Mi alegato sobre la Cárcel de Úbeda.

No he entrado mucho en este tema porque creo que se ha politizado demasiado y yo siempre me he considerado una persona distante de la política, ahora como historiador del arte no puedo dejar pasar estos días calientes sin dedicarle un alegato:
Le dice el archidiácono al juez Frolo cuando iba a ahogar al bebé Quasimodo en un pozo de la plaza de la catedral de París según la versión de Disney adaptada de la obra de Víctor Hugo: "Podrás engañarte a ti mismo, defender tu inocencia en tu clan; más no tiene perdón la maldad de tu acción, porque hay, mil ojos hay en Notre Dame." Sigue la canción diciendo que una vez que el juez escucha estas palabras mira a la fachada y ve a la Virgen María observándole junto a todos los reyes difuntos de Francia y expresa el narrador: "Frolo el déspota notó quebrarse su altivez, la punzada del temor sintió por una vez." Yo no quiero sentir mi altivez quebrada por callar y con el siguiente razonamiento expreso lo que me lleva a NO estar de acuerdo con la demolición:

1º La cárcel de Úbeda responde a la arquitectura llevada a cabo por la dictadura de Miguel Primo de Ribera y por tanto del final del reinado de Alfonso XIII, respondiendo a un gran período constructivo que se dio por toda España y que actualmente se lleva a una considerable conservación; el caso más claro es la plaza de España, el Parque de María Luisa y el hotel Alfonso XIII de Sevilla.

2. La Revolución Industrial en España se considera bastante tardía y este edificio responde a ese proceso histórico en donde se está conservando y rehabilitando todo lo que tiene que ver con él. Caso muy similar la estación de metro de Chamberi de la línea 1 de Madrid.

jueves, 10 de abril de 2014

LA RECONQUISTA DE ÚBEDA

La Reconquista Ubbadat-Al-Arab, donde Akil, antiguo sultán de Úbeda, escribe desde su exilio al sultán de Granada para contarle la historia de su pueblo.




La Muralla de Úbeda es una cerca militar, principalmente del siglo X, que rodea el casco antiguo de la ciudad de Úbeda, provincia de Jaén y declarada Monumento Nacional.

Historia

Propia de la importancia estratégico-defensiva que adquirió la ciudad jiennense, su amurallamiento fue impresionante -como aún hoy podemos apreciar-. De él afirmaba Argote de Molina en su «Nobleza del Andalucía», publicada en 1586: «Es la Ciudad de Úbeda cercada de muralla muy fuerte y hermosamente torreada que le da mucha majestad y ornato». Cuarenta y cuatro años más tarde (1630), otro historiador, Pedro Méndez de Silva, cita a Úbeda en su célebre «Población de España», en los siguientes términos: «Con fuertes y torreados muros, hermoseada de vistoso alcázar se descubre en un cerro la ciudad de Úbeda».
La primera vez que se menciona la cerca de Úbeda en fuentes documentales fue con motivo de la batalla de Navas de Tolosa. Cuando los moradores de Baeza ante la cercanía de los ejércitos cristianos se refugian en la mezquita de Úbeda al amparo de sus murallas. Fuera de las murallas, la ciudad se extendía a través de "la jerquía", análogamente a como en Córdoba conocen la ciudad baja o axerquía.
Sus muros estaban siempre hermosamente almenados y desde ellos, los heraldos y vigías proclamaban a toque de timbales y clarines los acontecimientos más notables. Cada puerta y torre estaba amparada por un caballero y su noble estirpe.
Ya en 1700, los huecos entre las torres comienzan a ser ocupados por casas, aprisionando la muralla y dejándola a merced de los vecinos de ésas casas, quienes para hacerlas más espaciosas, clandestinamente la hacen desaparecer.
A partir de 1821, la muralla empieza a ser totalmente abandonada, y se empiezan a enajenar sus terrenos para aliviar las penurias del Concejo. Año tras año, con indiferencia se van arrancando piedras a la muralla. En 1876 se derribó la celebérrima Puerta de Toledo.

Descripción

Rodeaba a la ciudad-acrópolis. Se conformaba con dos recintos. El primer recinto amurallado se limitaría al Cerro del Alcázar, en una segundo momento se fortificarían los arrabales surgidos en torno a este primer núcleo. Aún se conserva en gran parte éste segundo anillo defensivo, incluyendo algunas de sus antiguas puertas y bastantes torres. En total contaba con 9 puertas (13 si sumamos las del Alcázar):
La más importante con diferencia, por su monumentalidad y significancia era la desaparecida Puerta de Toledo, frente a la que se abrió el mercado, y bajo la cual el Emperador Carlos juró los fueros ubetenses. Fue demolida incomprensiblemente a comienzos del XIX.
Las tres puertas principales que se conservan son:
  • La Puerta del Losal, o de Valencia, es mudéjar, se compone de un doble arco de herradura apuntado y un arco exterior de medio punto, sustentado por columnas octogonales. Su estilo mudéjar es un buen ejemplo de las técnicas musulmanas que se continuaron utilizando tras la reconquista.
  • La Puerta de Granada, se enmarca en arco de medio punto y sigue la misma línea de muralla. Daba acceso al antiguo Camino Real de Granada. Junto a ella, se hallaba el majestuoso Arco de San Lorenzo, demolido en 1856. También se encuentra un pilar abrevadero desde época inmemorial. En los alrededores, se encuentran restos de las curtidurías de la época islámica, la llamada "Plaza de las Tenerías" y, por detrás, restos de la Barbacana. La tradición dice que por esta puerta se dirigió la reina Isabel la Católica a la conquista de Baza. Asimismo, se afirma que el que sea capaz, delante de la puerta, sólo ayudado de la boca de comer una Granada sin dejar caer un solo grano, hallará un tesoro a sus pies.
  • La Puerta de Santa Lucía o puerta mudéjar de Quesada: ha sido reconstruida pero conserva el arranque de los arcos originales y de la cimentación. Da acceso al barrio árabe y alfarero de San Millán y marca el inicio de la Redonda de Miradores, notable mirador a los campos que rodean la ciudad. Por su cercanía, se presume la sustituta de la que podía ser la llamada ''Puerta de Ibiut'', cercana a la mítica torre de Ibiut, origen mítico de la propia Úbeda, así como con el llamado en algunos escritos como "Arco de Viuz", o también Puerta de Bahud o Abehud.
Aún, se pueden ver otras puertas, como la de la Corredera, o el Portillo del Santo Cristo, que son reconstrucciones aproximadas. Recientemente, la demolición de varias casas apoyadas en la muralla, ha sacado a la luz en la cuesta Carvajal una parte de la puerta que daba acceso al barrio judío, los restos de la Puerta del Baño, con base de su torre del mismo nombre.
Otras puertas importantes y desaparecidas eran la Puerta de Jaén, Puerta de Calancha y la Puerta de Sabiote.
En cuanto a las torres, hay que destacar la de las torre de las Arcas, en la Corredera, torre albarrana de forma octogonal, y la Torre del Reloj, en la Plaza de Andalucía, con un bello templete superior de estilo Renacimiento, que contiene el cuerpo de las campanas. Su gigantesca campana de bronce, es la más antigua de la ciudad, de 1574 data, y pesa 123 arrobas y 14 libras, o sea, 1.422 kilos. Tocar a fiesta con tal noble campana, fue siempre un signo de distinción.
Con posterioridad, cada nuevo barrio o arrabal, se fue amurallando, abriendo nuevas puertas y postigos anexos a la cerca principal.
La parte sur de la muralla, constituye en gran parte un bello paseo, pues desde ella se contempla las nevadas alturas de Sierra Mágina y la Sierra de Cazorla, además del típico paisaje del mar de olivos, alineados sobre la infinidad de pequeñas colinas del amplio valle del Guadalquivir.

Recinto del alcázar

La muralla interior o del alcázar, corría entre la puerta del Baño, por el arroyo de Santa María, hasta al Plaza de Santa María, y desde aquí partía de oeste a este por la calle alta del Salvador hasta la Torre de Tierra, - junto a la Puerta de Bahud - aún queda en pie la parte baja del muro que entroncaba con aquella puerta.
Por la parte S. no tenía puerta alguna que la uniera directamente con extramuros porque la alcazaba se encontraba en una gran altitud y el terreno al pie de la muralla era cortado a pico, haciéndola inexpugnable y por lo tanto sin salida.
La puerta principal daba a la calle Baja del Salvador. Existía un postigo o puerta secundaria que enlazaba directamente la mezquita con la ciudad. Todavía se conserva - es la actual puerta de entrada desde el claustro al despacho parroquial. Se trataba más tarde del único acceso de los habitantes de Úbeda a la Iglesia Mayor.

viernes, 24 de enero de 2014

NUESTRA SEÑORA DE LA PAZ


Pon, la paz, a este concierto de mundo.
Pon la paz, María, de Nazaret;
Que suena desafinado, por doquier.
Noticias devastadoras, crímenes a inocentes.
Se roba el pan del hambriento, la casa a los indigentes.
El derecho al no nacido, la fe a los creyentes.
No lo permitas virgencita, que el mundo gire al revés.
Pues todos somos tus hijos, y nos llevas en tu pecho
En recuerdo a nuestro Dios, Amor Divino,
Madre de paz, flor del olivo.
Esencia virtuosa, del camino de tu hijo.
Madre solícita en las bodas de caná.
Ilumínanos en la palabra
Para florecer en este laberinto
Desátanos la trampa, que nos tienden y ahoga,
La soga de la injusticia,
Llévanos a la concordia
Intercede con tu paz, a toda hora
Siembra en nuestras familias, la semilla
De la mostaza, y la hierba buena.
Cuídanos en tu casa, protégenos de la alimaña.
Haz que nazcamos nuevos de tu entraña.
Guíanos dulce madre, a la casa del padre
Llenos de júbilo, morar, en la paz de su morada.
-------------------
Mercedes Ramos.

jueves, 2 de enero de 2014

BLAS MÁRQUEZ COTILLAS





Blas era un castellano trasplantado a Úbeda, un manchego que fue tomando esa sobriedad que las piedras de nuestra ciudad desprenden y con la que impregnan a cualquier persona con un mínimo de sensibilidad.


Su conversación era medida, no gustaba repetir las cosas y como todo en la vida tiene su equilibrio, él lo buscaba también en el lenguaje al que, siempre, gustaba perfeccionar y pulir.

Su vida fue rica en amigos que supo conservar y aumentar. Fiel a su equipo de toda la vida: el Atlético de Madrid al que seguía y siempre esperaba. (Hasta hoy en día, yo mismo creo que ser seguidor de él imprime un carácter singular.)

martes, 19 de noviembre de 2013

miércoles, 5 de junio de 2013

MUÑOZ MOLINA, PREMIO PRÍNCIPE DE ASTURIAS

El escritor ubetense Antonio Muñoz Molina ha sido galardonado hoy con el Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2013, al que optaban dieciocho candidaturas de once países, entre ellas las del también español Luis Goytisolo, el irlandés John Banville o el japonés Haruki Murakami.
Muñoz Molina, académico de la Lengua, es autor de obras como 'El invierno en Lisboa' (1987), con la que al año siguiente recibió los Premios Nacional de Narrativa y la Crítica; 'El jinete polaco', Premios Planeta y Nacional de Narrativa en 1991 y 1992, respectivamente; o 'Plenilunio' (1997), que obtuvo en 1998 el Premio Fémina a la mejor novela extranjera.
En los últimos años fueron distinguidos con este galardón el novelista estadounidense Philip Roth (2012); el poeta y cantante canadiense Leonard Cohen (2011); el escritor libanés Amin Maalouf (2010); el narrador, ensayista y poeta albanés Ismaíl Kadaré (2009), y la escritora canadiense Margaret Atwood (2008).
Los premios Príncipe de Asturias están dotados, cada uno de ellos, con una escultura de Joan Miró -símbolo representativo del galardón-, 50.000 euros, un diploma y una insignia.
Ubeda ideal

¡Enhorabuena!

jueves, 23 de mayo de 2013

EL SAN JUANITO DE ÚBEDA

San Juanito 3DA partir de fotografías antiguas y con un avanzado programa informático se recrearon en 3D los volúmenes de las piezas perdidas. FOTO FUNDACIÓN CASA DUCAL DE MEDINACELIDieciocho años y medio después de enviarse a Italia para su restauración podrá conocerse el resultado de los trabajos realizados para recomponer la imagen del conocido como San Juanito (San Juan Bautista Niño), obra en pequeño formato (130 centímetros incluida la base) que estuvo desde el siglo XVI en el altar mayor de la Sacra Capilla de El Salvador de Úbeda, pero de grandeza artística toda vez que el prestigioso profesor Gómez Moreno la atribuyó en 1930 a Miguel Ángel. La escultura de mármol fue destrozada durante la Guerra Civil española cuando el emblemático templo ubetense se utilizó como garaje, aunque pudieron conservarse algunos de sus fragmentos.
Tras mucho tiempo de incertidumbre y dudas a la hora de acometer unos trabajos de restauración realmente complicados, las nuevas tecnologías aplicadas a la recuperación de obras de arte han permitido llevar a buen puerto el proyecto. Ha sido así en el Opificio delle Pietre Dure de Florencia, uno de los institutos de restauración más importantes del mundo y máximo especialista en piezas de mármol del Renacimiento toscano, que recibió el encargo de la Fundación Casa Ducal de Mecinaceli, titular de El Salvador y del San Juanito. Y paralelamente a la recuperación de la escultura, se ha realizado un exhaustivo estudio de la misma que, según todo apunta, se decanta hacia la autoría de Miguel Ángel. Esto la convertiría en su única pieza existente en España (aunque existes otras atribuciones).

sábado, 2 de marzo de 2013

JOSÉ JAVIER DELGADO: ENHORABUENA

José Javier Delgado Pulpillo dirigiendo a la Banda Joven de la Agrupación Musical Ubetense.
Úbeda puede presumir de una cantera de jóvenes músicos que vienen empujando y que, según todo apunta, darán bastante que hablar en un futuro no muy lejano. Un ejemplo claro es José Javier Delgado Pulpillo, quien se encuentra cursando segundo curso del Grado de Composición y Orquestación en el Conservatorio Superior de Sevilla, y que ya ha estrenado alguna obra y ha asumido la dirección en algún concierto.
 


viernes, 11 de diciembre de 2009

ÚBEDA


Úbeda se halla situada a  los 38 grados de latitud y a los 2º 30' de longitud al E. del meridiano de Madrid (13º 8' al O. del meridiano principal). Su término municipal abarca 463,09 kms cuadrados: limita con los de Navas de San Juan, Arquillos, Cabra del Santo Cristo, Jódar, Villacarrillo, Sabiote, Torreperogil, Quesada, vilches, El Mármol, Rus y Baeza. Su altura sobre el nivel del mar es de 758 metros.
                   El origen de nuestra ciudad es muy antigua y como tantas otras también tiene leyenda para su fundación. Habla de Tubal que engendró a Ibero; Ibero  procreó a Idubeda y a Ibiut. Se habla de una inscripción en piedra sita en la antigua Ubeda la Vieja que decía así:
  Tubal me hizo primero
Ibero el segundo fue
Idubeda es el tercero
Bétula soy de los tres.
              Referencias escritas de Bétula existen pues nos describen un viaje de Publio Escipión  por Cástulo y después por Bétula. Del origen sí hay más incertidumbre pues podría remontarse su creación a gentes bastetanas u oretanas. La traslación del pueblo hasta su ubicación actual también tiene su leyenda pues se dice que se debe a Idubeda después de haber ganado a su hermano Ibiut la torre de este nombre que existía donde está la Ubeda actual.
             Después de estas referencias Úbeda, ya sita en la famosa loma que lleva su nombre, se descubre como enclave importante en la dominación árabe. Hay vestigios que así lo atestiguan. Después de la conquista para la cristiandad por Fernando III el Santo, en 1234 , la ciudad va tomando importancia por los hombres y familias nobles que tienen clara influencia en los reyes de aquellos tiempos. Hombre preclaro fue D. Francisco de los Cobos, Secretario del rey Carlos I de España y V de Alemania. Es en el Renacimiento cuando Úbeda goza de su mayor esplendor. Aquí viene a cantar sus "maitines al cielo" Juan de la Cruz.

Temas sugeridos

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Sic transit gloria mundi

trucos blogger