Con Cicerón, repito: “Mi conciencia tiene para mí más peso que la opinión de todo el mundo”
La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el
silencio.
Cuando mejor es uno, tanto más difícilmente llega a sospechar de la
maldad de los otros.
Los hombres son como los vinos: la edad agria los malos y mejora
los buenos.
La confidencia corrompe la amistad; el mucho contacto la consume;
el respeto la conserva.
Estos son malos tiempos. Los hijos han dejado de obedecer a sus
padres y todo el mundo escribe libros.
En cuanto a la adversidad, difícilmente la soportarías si no
tuvieras un amigo que sufriese por ti más que tú mismo.
"En las
horas de peligro es cuando la patria conoce el quilate de sus hijos."
"Estar
contentos con lo que poseemos es la más segura y mejor de las riquezas."
"Hago
más caso del testimonio de mi conciencia que de todos los juicios que los
hombres hagan por mí."
"Somos
esclavos de las leyes para poder ser libres."
"La
amistad comienza donde termina o cuando concluye el interés."
"Es
bueno acostumbrarse a la fatiga y a la carrera, pero no hay que forzar la
marcha."
"De
hombres es equivocarse; de locos persistir en el error"
"Son
siempre más sinceras las cosas que decimos cuando el ánimo se siente airado que
cuando está tranquilo."
"La
aspiración democrática no es una simple fase reciente de la historia humana. Es
la historia humana."
"Mi
conciencia tiene para mí más peso que la opinión de todo el mundo."
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