¿Sientes la
necesidad de hablar a espaldas de otros para hacerte el bromista del grupo o un
poco más interesante?
Si hablas
sobre tus amigos a sus espaldas, piensa cómo se sentirán.
Antes de que
empieces a pasar información, detente y piensa qué estás haciendo. Luego haz un
pacto contigo mismo para detener esa costumbre de hablar de tus amigos a sus
espaldas de una vez por todas.
Averigua qué
es lo que te atrae tanto de hablar de los demás. Sea cual sea tu motivación,
necesitas llegar a la raíz de por qué crees que está bien hablar a espaldas de
los demás para saber como parar. Considera cual de los motivos se aplica más a
ti:

·
Reputación personal: Expandir un rumor sobre otra persona, sea verdad o
no, puede dañar la reputación de una persona de manera irreparable, especialmente
si viene de una fuente cercana a esa persona.
· Reputación
profesional: Piensa que
tus palabras podrían estar afectando a la seguridad financiera y las
perspectivas de negocio de tu amigo. Piensa en como tu rumor puede impactar no
sólo en tu amigo, sino también en su familia y empleados.
· Reputación
familiar: Aunque
estés hablando sólo de tu amigo, tus palabras pueden afectar también e su
familia, incluidos sus hijos. Los miembros de la famila son inocentes y no
deberían verse afectados o dolidos por tus palabras.
Comunícate con inteligencia. Aprende la diferencia entre los chismes
dañinos, desahogarte con los amigos o simplemente transmitir
información acerca de un amigo. Descubre la diferencia entre hablar a
espaldas de un amigo indiscriminadamente o dar información que es importante.
Afronta los hechos. Pregúntate a ti mismo lo que dice de ti el hablar de
los demás. Piensa en qué te convertirás cuando hables de tus amigos a sus
espaldas.
Cierra la boca. Excúsate mentalmente o físicamente de una
conversación cuando se esté convirtiendo en chismorreo para evitar "caer
en la tentación" de hablar de otros o de socializarte mientras
desmoralizas a los demás
Aumenta el factor de respeto. Si has estado usando el chismorreo
como muleta social, es hora de despertar. Sea lo que sea lo que te lleva a
hablar de tus amigos a sus espaldas, se reduce a aprender a respetar más, tanto
a ti mismo como a los demás.
Pide perdón
a tu amigo si es necesario. Si tu amigo se entera de que has hablado a sus espaldas, sé fuerte y
discúlpate.
De ahora en adelante, lucha para hablar sólo bien de
tus amigos. Recuerda y
observa este viejo dicho: "Hay dos tipos de personas: amigos y extraños. A
los amigos se les quiere demasiado para hablar mal de ellos; a los extraños se
les conoce muy poco para hacerlo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario