¿Alguna vez no te ha pasado que has tenido la
oportunidad de ganar alguna cosa, y la dejaste pasar?
“No
hay que perder las oportunidades que se nos presenten y no hay que desperdiciar
o gastar algo que tenemos”
El siguiente relato nos ofrece una visión de este
paradigma…
El diablo dijo;
- Hagamos un trato…
El hombre de los ojos grandes dijo;
- No, no y no, no quiero.
El hombre de la boca grande dijo;
- Vale, hagamos un trato!
De esta forma en el jardín del hombre de la boca grande florecieron mil flores distintas.
Al contrario…el hombre de los ojos grandes era tan pobre que se moría de hambre y no sabía qué hacer.
En cambio, el hombre de la boca grande se pasaba los días riendo, feliz y contento y saciaba su apetito con las deliciosas frutas de su jardín.
Por ese motivo, no sé entero de que el jardín empezaba a morirse.
Cuando quiso darse cuenta, ya era tarde y el hombre de la boca grande no pudo hacer más que llorar en un jardín cuyos árboles y flores estaban marchitos. Deseó no haber pactado jamás con el Diablo.
El hombre de los ojos grandes, por su parte, se moría de hambre. Sus enormes ojos vertían lágrimas sin descanso.
Ojalá hubiese aceptado aquel trato -pensaba.
El diablo dijo;
- Hagamos un trato…
Pero, al final … ¿Quien sufre más?
¿Quien tenía todo y lo perdió?
o
¿Quien no tenia
nada?
Eduardo Ortega Pérez
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