Científicos de la Universidad de Alabama en
Tuscaloosa, Estados Unidos, aseguran que quienes mantienen rutinas diarias suelen
tener un sueño de más
calidad, ya que logran dormir
mejor, concilian antes el sueño y se despiertan menos durante la noche,
según los resultados de un pequeño estudio publicado en el «Journals of
Gerontology: Series B».
En dicho trabajo constataron esta mejoría en
aquellas personas que solían
trabajar y comer a la misma hora todos los días. En cambio, no había
diferencias en función de la hora de la cena, siempre que ésta fuera siempre la
misma, ya que la calidad del sueño era similar si cenaban a las 18.00 o a las
20.00 horas.
Además, la existencia de una rutina era
clave en el caso de los adultos jóvenes pero no en el caso de las
personas mayores, donde la variación de horarios se vinculó a veces con un mejor
sueño, explicó la psicóloga Natalie Dautovich, autora del estudio.
El estudio incluyó a un total de 50 adultos de
18 a 30 y otros 50 de entre 60 y 95 años. Los participantes llevaron un diario
durante dos semanas para ver cuándo realizaban sus actividades cotidianas y
anotar lo bien que dormían por la noche. Así, vieron que las personas que
informaban de una mejor calidad del sueño y de menos despertares por la noche
eran las que mantenían una rutina en sus actividades.
Sin embargo, la diferencia entre adultos jóvenes
y mayores abre varios interrogantes, sobre si la variación de su actividad
diaria puede ser también positivo para garantizar un buen sueño por la noche.
«Una mayor actividad y los niveles de alerta durante el día aumentan nuestra
necesidad de dormir por la noche», dijo Dautovich.
No hay comentarios:
Publicar un comentario