La clase de verdad que nuestros sentidos nos revelan es como la "verdad" que unos ciegos obtuvieron después de que cada uno de ellos hubo palpado una parte de un elefante. En esta historia tradicional, varios ciegos se encontraron ante un elefante, criatura que nunca habían confrontado anteriormente.
Durante unos pocos segundos, antes de que el cuidador se llevara al elefante, cada uno de los ciegos tuvo la oportunidad de tocar alguna parte de la enorme bestia.
Durante unos pocos segundos, antes de que el cuidador se llevara al elefante, cada uno de los ciegos tuvo la oportunidad de tocar alguna parte de la enorme bestia.
Después de eso cada uno de ellos estaba convencido de que sabía cómo era un elefante.Discutieron entre ellos acaloradamente. El que había puesto sus brazos alrededor de una de las enormes patas dijo: "Un elefante, lo sé muy bien por experiencia propia, es como una columna".
Otro, que había puesto sus manos sobre el amplio costado de la criatura, dijo: "¡No! Es como una pared".
Los otros tenía diferentes opiniones. "Un elefante es como una soga", dijo el que le había tomada la cola. "¡Idiotas! Ustedes están todos locos. Un elefante es como la aguda punta de una lanza", gritó el que le había tocado uno de sus puntiagudos colmillos. Cada uno de los ciegos, muy seguro de sí mismo, afirmaba tener conocimiento, fundamentándose en haber tocado a la bestia.
Los otros tenía diferentes opiniones. "Un elefante es como una soga", dijo el que le había tomada la cola. "¡Idiotas! Ustedes están todos locos. Un elefante es como la aguda punta de una lanza", gritó el que le había tocado uno de sus puntiagudos colmillos. Cada uno de los ciegos, muy seguro de sí mismo, afirmaba tener conocimiento, fundamentándose en haber tocado a la bestia.
Había algo de verdad en la falsedad de lo que decía cada uno de ellos, y esa falsedad estaba conectada con la verdad. Por lo tanto, el conocimiento de cada uno era una falsedad que contenía una verdad incompleta conectada con la verdad. Es fácil ver que cada uno de los equivocados ciegos, de haber investigado un poco más su falsa "verdad", hubiera llegado a reconocerla como una falsedad o, cuando mucho, una verdad incompleta.
En realidad, toda falsedad está siempre conectada en cierta forma con la verdad, aunque quizás no tan obviamente como lo está una pata o una trompa al elefante.
Una falsedad es verdad cuando se la conoce como falsedad; en este sentido, toda falsedad está conectada con la verdad. En otro sentido, la conexión existe porque el valor mismo de la falsedad depende de algún hecho que es verdad, pero que la falsedad contradice o no refleja completa o adecuadamente. Si la falsedad no estuviera conectada de ninguna manera con la verdad, la indagación sobre la falsedad sólo conduciría a una comprensión mejor de la falsedad, no de la verdad. Pero, como la falsedad está conectada con la verdad, el reconocimiento de la falsedad como falsedad puede conducir a una indagación apropiada que revelará la verdad.
Una falsedad es verdad cuando se la conoce como falsedad; en este sentido, toda falsedad está conectada con la verdad. En otro sentido, la conexión existe porque el valor mismo de la falsedad depende de algún hecho que es verdad, pero que la falsedad contradice o no refleja completa o adecuadamente. Si la falsedad no estuviera conectada de ninguna manera con la verdad, la indagación sobre la falsedad sólo conduciría a una comprensión mejor de la falsedad, no de la verdad. Pero, como la falsedad está conectada con la verdad, el reconocimiento de la falsedad como falsedad puede conducir a una indagación apropiada que revelará la verdad.
Cada uno había palpado una sola de las muchas partes. Cada uno lo había percibido erróneamente. Ninguno conocía la totalidad; el conocimiento no era compañero de los ciegos. Todos imaginaron algo, pero algo equivocado.
De la misma forma, la criatura humana no está informada acerca de la divinidad y no existe camino por medio de intelecto ordinario.
De la misma forma, la criatura humana no está informada acerca de la divinidad y no existe camino por medio de intelecto ordinario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario