Comienza en Tánger la décima edición del festival Twiza (hasta el 17 de
agosto) dedicado a la cultura bereber ('Amazigh') por el lado
musical acuden estrellas como Ithrane, el argelino Cheb
Mami, el senegalés Ismael Lô, el argelino de la
Kabilia Idir o el artista local Muslim,
recientemente reconocido como el mejor rapero de Marruecos.
El festival ofrece un ciclo de conferencias y mesas redondas bajo el título
'África para los africanos' en el que se debatirá sobre el
desarrollo cultural del continente y la desglobalización. El
festival es gratuito y forma parte de una reivindicación reciente la de la
pujante cultura bereber anterior a la islamización
norteafricana por los árabes.
Idir es un cantautor procedente de la Kabilia argelina una
de las regiones de mayoría bereber y que ha protagonizado tensiones con el
gobierno de Argel. Idir es un firme defensor de su idioma y de la singularidad
de la música 'amazigh' pero también es un creador atento a otros sonidos.
Tanto
es así que en su último álbum toma un estribillo de los Chunguitos
en una composición titulada 'Músicas del sur'. Idir
tuvo una notable repercusión internacional con su álbum
'Identités' (1999), donde colaboran Manu Chao,
Geoffrey Oryema, Thierry Titi Robin, Orchestre National de Barbès, Zebda y Gnawa
Diffusion, entre otros.
La ciudad de Tanger es un enclave multicultural
con comunidades de las tres religiones (musulmana, judía y cristiana).
También se alza como foco de atracción de innumerables
escritores como Paul Bowles, William Burroughs, Jack Kerouac o
Tennessee Williams, que vivieron o visitaron la metrópolis al amparo de su
singularidad política al tratarse de la ciudad internacional
desde 1925 hasta su incorporación a Marruecos. De hecho, la
película 'Casablanca' está inspirada en el ambiente y las
narraciones de Tanger.
Uno de los artistas locales más peculiares es el rapero
Muslim, nacido en un barrio humilde en 1981 e iniciado en el hip hop en
la adolescencia. En 1998 comenzará a formar parte del grupo Zanka Flow, uno de
los pioneros del pujante rap marroquí. Su último álbum, 'Al
Rissala' (La carta) le ha lanzado al estrellato en Marruecos
reivindicando un cambio profundo y drástico en las clases más
desfavorecidas del país. Un éxito refrendado por el premio al mejor rapero de
Marruecos.
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